En la ciudad natal de Julio Verne, como si de una ficción se tratase, extraños cinturones multicolor ciñen breves círculos de naturaleza dominada por el arte floral del jardinero que sabe acariciarla.
sábado, 20 de septiembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario